11 feb 2009

¿Quién sabe?

Sabíamos no decirnos nada 
conservando en apariencia, una amistad consolidada.
Sabíamos no exigirnos mucho, "Hola, ¿qué haces?, 
convidame un pucho, que me tenés abandonada."

Vos con tu mochila a cuestas.
Yo con la excusa perfecta, para charlar de pavadas.
Nos hizo un guiño San Telmo, 
un poco de humo en el mediy enloquecieron las miradas.

Quiso el destino que esa noche hiciera frío
y que el ruido de los coches me hiciera hablarte al oído.
Y si el diablo se contenta con que dudes un instante.
Vos y yo, nuestras miserias y esta noche por delante, amor.
¿Quién sabe?

Un umbral perdido
y aquel bar medio vacío como único testigo.
Brindamos por el olvido y el espíritu del vino
se fue haciendo nuestro amigo.

Con el corazón en llanta,
nada mejor que tu lengua abrigando mi garganta.
Y conga, conga, conga, conga. Y que siga la milonga, amor.
Que el mozo traiga otra ronda y que pague Dios.

Quiso el destino que ya no hiciera más frío
y sin coches y sin ruido sigo hablándote al oído.
Y el diablo que se contenta con que dudes un instante.
Vos y yo, nuestras miserias y esta noche por delante amor.
¿Quién sabe? Amor...
¿Quién sabe?

No hay comentarios: